a nada

Bríndame un respiro que yo te daré mi alma, dame tus manos y en ellas pondré mi corazón...
pero no quiero tu respiro en el mío, y no quiero tus manos en mi pecho...
Bríndame de una vez, esa mirada tierna y comprensiva que del viento es felicidad, y dame tu boca en forma de libro...
pero no quiero tu mirada siempre para mí... y no quiero tu boca como alimento...
Más dame seguridad, no necesidad..
dame tu amor, pero no mi prisión...
dame tus manos, pero no los grillos que me mantienen muerto en vida...
dame tu mirada con amor... que necesito que inspires versos dulces que salgan de mi boca como pequeñas lenguas de fuego iluminando el lugar...
que salgan de mis ojos perlas de paz, que adornen tu cuerpo...
toma mi mano para quererme, no para odiarme...
bésame siempre, y no me beses para luego hacerme olvidar..
ay! de mí... si supiera donde estoy... si supiera quien eres... ó si supiera quien soy, sería todo distinto..
sabría a quien le escribo, y porqué escribo así...
oh! amiga mía.. te amo...
eres la mitad de mi respiración, eres mi desición...
si supieras cuanto te amo, sabrías que los versos de anoche eran en ceguera...
sabrías que los versos de anoche.. eran de un prisionero que saldría de su prisión..
sabrías que lo de anoche... (con los ojos brillosos y la voz temblando)...
fué solo amor... envestido de locura... y temor...
hoy te pido perdón...
no quiero volver a esa mazmorra... no quiero que me engrilles... no quiero que la oscuridad me deje ciego otra vez...
porque te amo con pureza y honestidad...
iré a preparar el desayuno ...